¿Cómo lavar el calzado en la lavadora?

Si usas el mismo par de zapatos de forma muy continuada, puede que alguna vez hayas metido el pie en un charco o haya pasado algún día en el campo, podrían no estar tan limpios como el primer día. 

Si esto ocurre, que no cunda el pánico, hay varias formas de lavar el calzado, incluso en la lavadora. De hecho, la lavadora puede ser una gran aliada para darle una nueva vida a sus zapatos. Entonces, ¿cómo se lava el calzado en la lavadora? ¡Respuestas!

¿Qué tipo de calzado puede lavarse en la lavadora ?

Es perfectamente posible lavar el calzado en la lavadora, ¡aunque no pueden lavarse todos los tipos de zapatos! Las zapatillas de lona como las Converse o las Bensimon y otras similares pueden lavarse en la lavadora sin problema. En cambio, los zapatos de piel, imitación piel o de ante no podrían soportar el lavado a máquina y lo más probable es que salieran deformados. Las zapatillas deportivas, los botines y los mocasines tampoco pueden lavarse en la lavadora. Sin embargo, hay métodos y productos que pueden utilizarse para limpiar muy bien este tipo de calzado.

Por lo tanto, el calzado que puede meterse en la lavadora son básicamente las zapatillas de tela de lona. Este tipo de calzado es lo suficientemente resistente como para soportar su paso por la lavadora. Además, las manchas en las zapatillas de lona son especialmente difíciles de eliminar, por lo que un lavado en la lavadora será de lo más pertinente para devolverles su esplendor.

¡Prepars tu calzado antes de lavarlo !

En primer lugar, es importante preparar el calzado para el lavado. Quits los cordones de los zapatos antes de meterlos en la lavadora. Si están muy sucios y son blancos, se puede hacer una primera limpieza con limón o percarbonato de sodio. Además, si los cordones no quedan lo suficientemente limpios tras el lavado, ¡pueden cambiarse sin necesidad de sustituir todo el zapato!

Para lavar el calzado en la lavadora, también es necesario prepararlo. Si están muy sucios, se recomienda eliminar el exceso de suciedad con una esponja antes de meter los zapatos en la lavadora. Los resultados serán aún mejores. 

Si la capacidad de la lavadora lo permite, es posible lavar varios pares de zapatos en un solo lavado para ahorrar agua y energía. 

Lavar el calzado en la lavadora con el programa adecuado

Antes de lavar los zapatos en la lavadora, debes tomar algunas precauciones. Si los lavas en una lavadora doméstica, es decir, en la que tiene en casa, hay que tener cuidado de que no dañen el tambor de la máquina. La acción mecánica de la lavadora hará que los zapatos se golpeen contra el tambor, lo que puede provocar la rotura de algunos componentes y dejar la lavadora inservible. Para evitarlo, lo mejor es envolver los zapatos en una toalla de rizo grande o, incluso, meterlos entre las prendas de ropa.

También puedes usar una lavadora como las que pueden encontrarse en las lavanderías automáticas. Las lavanderías Wash ME, por ejemplo, cuentan con un equipo mucho más robusto que las lavadoras domésticas, y son capaces de soportar sin problema el lavado del calzado. Además, son accesibles las 24 horas del día y los 7 días de la semana, para una mayor comodidad.

Antes de lavar los zapatos en la lavadora, selecciona el programa adecuado. Existen programas especiales para el lavado de zapatos, pero si la lavadora que eliges no tiene uno específico para ello, un programa de 30 grados para ropa delicada será adecuado. Los cordones también pueden meterse en el tambor de la lavadora.

A la hora del centrifugado, también es aconsejable tomar algunas precauciones para evitar dañar la lavadora. Selecciona un centrifugado entre 400 y 800 rpm, ya que será la mejor manera de eliminar todo el exceso de agua. 

Como puedes ver, ¡lavar los zapatos en la lavadora es muy fácil! Pero ten en cuenta que los zapatos solo deben lavarse de vez en cuando para evitar que se deterioren de forma prematura.

¿Y el secado ?

Solo debes utilizarse la secadora si la secadora doméstica o la de la lavandería elegida cuenta con un programa específico para secar el calzado. De lo contrario, se recomienda secar los zapatos al aire libre. Lo ideal es elegir un lugar seco, aireado y protegido del sol. Al contrario de lo que se podría pensar, aunque el sol tiende a acelerar el proceso de secado, también puede dañar el tejido de los zapatos. 

El proceso de secado puede durar varios días, pero es necesario esperar a que los zapatos estén completamente secos antes de volver a usarlos. Entonces, ¡ya solo tendrás que volver a ponerles los cordones para disfrutar de sus zapatos limpios!

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